El LaboMill-1 es la respuesta de FPS a las necesidades de laboratorio de I+D cuando se trata de fases de desarrollo muy iniciales, cuando sólo hay disponibles "tamaños de lote" extremadamente pequeños. Esta cantidad muy limitada de material - a partir de 200 mg - requiere el uso de un equipo muy especial diseñado y desarrollado mediante un proceso de "miniaturización".
A pesar de las reducidas dimensiones, el LaboMill-1 puede asegurar una escalabilidad completa del proceso de micronización con otros jet mills de FPS.
Los jet mills LaboMill-1 pueden integrarse fácilmente en un aislador de FPS para una manipulación segura y procesamiento de productos API de alta potencia o productos tóxicos.