Para los profesionales de primeros auxilios, como la policía, los bomberos y los servicios de emergencias, el DEA Lifeline es un equipo estándar. Para escuelas, oficinas, tiendas, centros comerciales, fábricas y lugares públicos. Se está convirtiendo en algo tan vital como el extintor de incendios.
El desfibrilador semiautomático LIFELINE AED es lo suficientemente avanzado tecnológicamente como para incluir todas las funciones críticas necesarias para proporcionar el tratamiento más avanzado para la parada cardiaca súbita, pero tan sencillo y poco intimidante de usar que incluso el personal no médico puede salvar vidas de forma eficaz.
El DEA Lifeline ha sido desarrollado por equipos de ingeniería multidisciplinares experimentados e incorpora técnicas de procesamiento de señales digitales de última generación y algoritmos avanzados de análisis de ECG. Esto permite que el dispositivo supere las recomendaciones de rendimiento de la American Heart Association, dando al usuario la seguridad de que se está administrando la terapia correcta.
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