El lavabo quirúrgico BAWER está pensado para entornos como quirófanos y laboratorios, donde la necesidad de higiene y funcionalidad es primordial. No tiene bordes ni esquinas afiladas, lo que garantiza la seguridad del personal, la ausencia de zonas de estancamiento y facilita las actividades periódicas de higienización.
La soldadura se realiza con personal y procesos certificados. El lavabo está equipado con una pared frontal con el cuerpo del lavabo formado en una sola pieza, sin juntas, para una higiene perfecta de la superficie.
El flujo de agua en el fondo de la piscina está garantizado por el elegante patrón de rombos, una característica de las soluciones BAWER.