Seguridad contra la pérdida de agua
La mayoría de las tecnologías de vacío miden la vida útil en términos de "horas", pero el anillo líquido la mide en décadas. La ausencia de álabes y de fricción se traduce en una vida útil extraordinariamente larga con unos requisitos mínimos.
El anillo líquido es una tecnología sencilla. Un rotor hace girar un fluido de sellado (normalmente agua) dentro de una carcasa cilíndrica. Como el rotor está desplazado respecto a la carcasa, el fluido entra y sale de los "cubos" a medida que gira el rotor. El fluido actúa como un pistón ideal, bombeando aire prácticamente sin fricción. El rotor nunca toca la carcasa, por lo que la bomba no sufre desgaste interno.
El consumo de agua y la pérdida de suministro se citan a menudo como razones para renunciar a las ventajas de los anillos de líquido. El BeaconMedaes LifeLine® Camel ofrece la respuesta a ambos problemas mediante un depósito a bordo que contiene hasta 48 horas de agua de sellado de reserva.
A diferencia de otras opciones tecnológicas, los sistemas de anillo líquido pueden ingerir volúmenes de contaminantes líquidos sin que ello afecte notablemente al funcionamiento de la bomba.
---