La punta cónica pulida con precisión ofrece una excelente estabilidad en línea recta y una mayor resistencia a la punción que una aguja de corte, lo que facilita sentir si la duramadre se ha perforado con éxito.
El orificio de punción más pequeño provoca menos fugas de líquido cefalorraquídeo que cuando se utiliza una aguja de corte, y muchos usuarios han informado de una menor incidencia de cefaleas pospunción dural (CPPD) como resultado.
Dedicado a ISO80369-6 (norma de conectores para neuroanestesia).
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