Un medidor de flujo máximo para el asma es como un termómetro para la fiebre. Ambos son herramientas que ayudan a controlar lo que ocurre en su cuerpo. Por ejemplo, a menudo puede sentirse febril, pero al tomar la temperatura, el termómetro no indica fiebre. En el caso del asma, a veces puede sentir que respira bien, pero al medir su función pulmonar con un medidor de flujo máximo, se ve algo reducida.
La lectura de un medidor de flujo máximo le indica el grado de apertura de sus vías respiratorias, para poder tratar mejor el asma.
¿Qué hace un medidor de flujo máximo?
El medidor de flujo espiratorio máximo es un dispositivo portátil que mide el flujo de aire, o tasa de flujo espiratorio máximo
Determinar la gravedad del asma
Controlar la respuesta al tratamiento durante un episodio agudo de asma
Monitorizar el progreso en el tratamiento del asma crónica y proporcionar información para cambios en la terapia
Detectar un deterioro de la función pulmonar y evitar un posible ataque de asma grave
Un medidor de flujo espiratorio máximo puede ayudarle a usted y a su alergólogo/inmunólogo a evaluar la gravedad de su asma en un momento dado.
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