Combinando la tecnología RFID y nuestras etiquetas criogénicas imprimibles por transferencia térmica en un solo producto, nuestras etiquetas criogénicas RFID son las primeras etiquetas criogénicas RFID que pueden utilizarse en nitrógeno líquido. Pueden imprimirse y codificarse con impresoras RFID de transferencia térmica. Su chip RFID UHF pasivo y flexible (Clase 1, Gen 2) puede codificarse con hasta 32 caracteres hexadecimales de información para registrar datos durante el procesamiento de las muestras. De este modo, la etiqueta resultante puede contener datos tanto visuales como electrónicos para lograr la máxima flexibilidad en el seguimiento de las muestras.
Diseñadas específicamente para el almacenamiento a corto y largo plazo a temperaturas ultrabajas y en entornos criogénicos, tienen un fuerte adhesivo permanente que garantiza su fijación en criotubos y viales, cajas criogénicas de cartón y polipropileno, bolsas de plástico y casetes triangulares para el almacenamiento de pajuelas. Pueden escanearse o leerse sin necesidad de una línea de visión directa, incluso cuando están en nitrógeno líquido o sumergidos hasta 38 mm en un baño de agua a 37 °C. Esto puede ayudar a eliminar la congelación no deseada. Esto puede ayudar a eliminar los indeseados ciclos de congelación y descongelación, preservando así la integridad de las muestras.
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