No es fácil desarrollar un nuevo producto en una categoría ya existente. Para ser reconocido, el producto tiene que sorprender por su gama de funcionalidades, aportar una estética que agrade a la vista y, lo más importante, ofrecer una propuesta de valor. Misión cumplida con Karma. Karma satisface con solidez una amplia gama de requisitos de asientos sanitarios, desde salas de examen y de pacientes hasta zonas de espera, reuniones, administrativas y cafeterías. Y Karma tiene aplicaciones que van mucho más allá de los entornos sanitarios.
Esta silla, diseñada para pacientes operados de la cadera y otras aplicaciones en las que se desea una posición sentada más elevada, tiene un reposapiés extraíble de 20 cm de profundidad, con una banda de rodadura antideslizante. El reposapiés puede girarse hacia arriba y hacia dentro para facilitar la limpieza y eliminar el riesgo de tropiezo.
Karma ha sido probada en laboratorio para cumplir con una capacidad de peso de 500 libras, en todas las versiones: con brazo y sin brazo, y todos los anchos (incluido el tamaño bariátrico).
El ángulo del respaldo y las patas traseras están diseñados para mantener el respaldo alejado de la pared, a fin de evitar el desgaste y los daños tanto en las sillas como en las paredes de las instalaciones.
Karma apila 7 sillas en el suelo y 12 en la plataforma móvil. Se puede especificar la funda opcional bajo el asiento para ayudar a evitar que la tapicería del asiento se deforme en las sillas que se van a apilar.
Como alternativa a la funda guardapolvo estándar bajo el asiento, esta opción, en polímero negro, cierra la parte inferior de la silla, funcionando como un protector contra salpicaduras limpiable para proteger el interior de la humedad. También ayuda a apilar la silla, distribuyendo el peso para eliminar cualquier hendidura en la tapicería del asiento
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