La gama LabTech satisface prácticamente las necesidades de cada laboratorio moderno con sus 14 modelos divididos en 4 familias que abarcan modelos con velocidad baja y rápida, ventilados y refrigerados, con capacidad baja y amplia, de sobremesa y estacionarios, soportados por una serie increíble de accesorios que ofrecen versatilidad y flexibilidad.
Los mejores por design, calidad y flexibilidad
Cuándo el físico holandés Christiaan Huygens acuñó por primera vez el término “fuerza centrífuga” en su DeVi Centrifuga, publicada en 1659, él no podía imaginar que innovación había introducido en el mundo científico. Mucho tiempo ha pasado desde entonces, con una sucesión de descubrimientos y mejorías como la ultracentrífuga del Premio Nobel Theodore Svedberg (¡algo como 900.000 xg!) de 1926 o la primera unidad estacionaria con refrigeración introducida por Ivan Sorvall en 1955. Es incluso gracias a estos pioneros que hoy en día las centrífugas de laboratorio representan instrumentos cruciales para aplicaciones innumerables, a partir de la ingeniería genética a hematología, de descubrimiento de fármacos a patología, de ciencias marinas a agricultura, etc.
9 buenas razones para eligir las Centrífugas LabTech
Refrigeración rápida
El enfriamento hasta 4°C desde la temperatura ambiente en sólo 5 minutos permite ahorrar tiempo
Hasta 100 (o 10) memorias de programa
Errores evitados y protocolos mantenidos
Motorized lid mechanism
Safety and convenience
Rotor ID
Identificación de rotor automática para operaciones seguras
Liberación automática de la tapa
Velocidad y seguridad
Amplia variedad de rotors, cubetas y adaptadores
Flexibilidad extrema y reducción de inversiones