1. Resistencia a la corrosión.
Si su cisterna va a estar expuesta a sustancias corrosivas o entornos duros, la opción de acero inoxidable 316 ofrece una resistencia superior a la corrosión, lo que garantiza un rendimiento duradero y un mantenimiento reducido.
2. Durabilidad.
Ambos grados de acero inoxidable son conocidos por su durabilidad y resistencia al desgaste, lo que garantiza que la cisterna siga siendo funcional y fiable con el paso del tiempo.
3. Higiene y limpieza.
El acero inoxidable es fácil de limpiar y desinfectar, lo que lo convierte en la opción ideal para entornos en los que la higiene es crucial, como las instalaciones médicas. La superficie lisa ayuda a evitar la proliferación de bacterias.
4. Personalización.
Las cisternas de esclusa de WJ Kenyon pueden adaptarse a sus necesidades específicas, lo que garantiza que obtendrá un producto que encaja perfectamente en el espacio previsto y satisface sus requisitos.
5. Longevidad.
Invertir en una cisterna de acero inoxidable de WJ Kenyon puede resultar en una vida útil más larga en comparación con otros materiales, reduciendo la necesidad de reemplazos frecuentes y mantenimiento.
6. Aspecto profesional.
El acero inoxidable ofrece un aspecto elegante y profesional, adecuado para diversos entornos, incluyendo instalaciones sanitarias, laboratorios y más.
7. Opciones para distintos entornos.
La posibilidad de elegir entre acero inoxidable 304 y 316 le permite adaptar la cisterna al nivel de resistencia a la corrosión necesario en función del entorno en el que vaya a colocarse.
8. Calidad y Fiabilidad.
WJ Kenyon es conocida por fabricar productos de acero inoxidable de alta calidad. Elegir su cisterna le garantiza una solución fiable respaldada por su experiencia.
---