Este torniquete se utiliza en situaciones de emergencia, en particular cuando se dan casos concretos de hemorragia externa en los que el único taponamiento de la herida no es capaz de detener la pérdida de sangre. Una de las principales características, así como uno de los puntos fuertes del Torniquete, es la facilidad e inmediatez de uso.
Esta característica se convierte en fundamental para rescatar a una persona en el menor tiempo posible ya que una vez superado el 40% de pérdida de sangre, el cuerpo humano entra en un estado de shock irreversible tras el cual es imposible salvar la vida.
Este torniquete se considera uno de los dispositivos fundamentales en materia de primeros auxilios y autorrescate, de hecho, si es capaz de hacerlo, la persona accidentada también puede colocárselo. Además, al ocupar un espacio mínimo, es muy cómodo de llevar y sirve para todo tipo de extremidades, ya sean de adultos, niños o animales.
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