Cinta de correr con baranda CURVE TRAINER
con inclinación

cinta de correr con baranda
cinta de correr con baranda
cinta de correr con baranda
cinta de correr con baranda
Añadir a mis favoritos
Añadir al comparador
 

Características

Opciones y accesorios
con baranda, con inclinación

Descripción

Similar a su contraparte de gran éxito, el Curve, el Curve Trainer se construyó con una inclinación más baja diseñada para caminantes y corredores que buscan desarrollar resistencia y aumentar la resistencia. El Curve Trainer brinda a cada usuario la capacidad de mantener un ritmo eficiente que permite repetibilidad y entrenamientos de mayor duración. CARACTERÍSTICAS ATRAE NUEVOS MIEMBROS CON EL ENTRENADOR Con movilidad ilimitada, el Curve Trainer permite al usuario tomar el control total de su entrenamiento, lo que permite una fácil transición entre varias velocidades y carreras de ritmo. ¿No estás de humor para correr? El Curve Trainer es una excelente plataforma para caminar y, al mismo tiempo, brinda todos los beneficios directos de correr. Quema hasta un 30 % más de calorías en esta máquina completamente autoalimentada. CINTA DE CORRER TOTALMENTE MANUAL: NO NECESITA ELECTRICIDAD A diferencia de la mayoría de las cintas de correr convencionales, Woodway Curve Trainer no requiere electricidad. Sin enchufe, sin factura de la luz, sin molestos cables. Disfruta de una experiencia de correr en cinta completamente manual sin ningún costo eléctrico. El Curve Trainer funciona cuando el usuario da un paso adelante a lo largo de la superficie de carrera, impulsando el cinturón con su paso No es necesario presionar un botón y esperar a que la cinta de correr se acelere. A medida que el usuario da zancadas más largas en la cinta curva, la velocidad aumenta y, a medida que el usuario simplemente retrocede hacia la parte trasera, la velocidad disminuye. La libertad que tiene el corredor en el Curve Trainer hace de este equipo la herramienta ideal para el entrenamiento en grupo

Catálogos

Curve Trainer
Curve Trainer
2 Páginas
* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.