Purificador de aire de pared MAX AAV-55-9
UVpara centro sanitariogermicida

purificador de aire de pared
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Características

Configuración
de pared
Tecnología
UV
Aplicaciones
para centro sanitario
Otras características
germicida, de alta eficacia
Área de cobertura

400 m²
(4.305,6 ft²)

Peso

14,5 kg
(32 lb)

Largo

169 mm
(6,7 in)

Ancho

453 mm
(17,8 in)

Altura

1.300 mm
(51,2 in)

Descripción

El uso de radiación ultravioleta bactericida es un eficaz agente profiláctico sanitario y antiepidémico destinado a suprimir la actividad vital de los microorganismos en el aire y en las superficies. El principio de funcionamiento del recirculador consiste en desinfectar el aire de la habitación. Con la ayuda de ventiladores, el aire entra en el recirculador, donde los virus, bacterias y microorganismos mueren bajo la influencia de la radiación ultravioleta con una longitud de onda de 253,7 nm. Antibact Air MAX AAV-55 es un recirculador de alta productividad de intercambio de aire que está destinado a la descontaminación del aire de grandes salas. El recirculador AntiBact Air MAX AAV-55 es uno de los medios para reducir la propagación de enfermedades infecciosas y complementa la observancia obligatoria de las normas y reglas sanitarias vigentes para el mantenimiento de locales. Los recirculadores Antibact Air MAX utilizan lámparas germicidas sin ozono que, a diferencia de las lámparas de cuarzo clásicas, no emiten ozono nocivo. El aparato es absolutamente seguro para las personas, los animales y las plantas, ya que la radiación ultravioleta permanece cerrada en el centro de la carcasa. El producto está certificado y cuenta con todos los permisos del Servicio Estatal de Sanidad y Epidemiología. Las instalaciones germicidas ultravioletas deben utilizarse en habitaciones con un mayor riesgo de propagación de enfermedades infecciosas en instituciones médicas, industriales y públicas.

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* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.