La glándula tiroides es uno de los órganos endocrinos más importantes del cuerpo, con la función de sintetizar, almacenar y secretar hormonas tiroideas. La glándula tiroidea tiene la función de sintetizar, almacenar y secretar hormonas tiroideas. La hormona tiroidea, la triyodotironina (T3) y la tiroxina (T4), son hormonas reguladoras importantes en el cuerpo humano, que pueden promover el metabolismo del cuerpo, mantener el crecimiento y el desarrollo normales del cuerpo, y también tienen una influencia importante en el desarrollo del hueso y del sistema nervioso [1,2].
Dado que los fármacos y las enfermedades pueden provocar una anormalidad de las hormonas tiroideas totales, pero las hormonas tiroideas libres (FT3 y FT4) se mantienen en niveles normales, la detección de FT3 y FT4 tiene un importante significado clínico[3].
La hormona estimulante de la tiroides (TSH) segregada por la glándula pituitaria participa en la regulación del eje de hipotálamo-hipófisis-tiroides para lograr el equilibrio dinámico de las hormonas tiroideas en el organismo[4].
La enfermedad tiroidea autoinmune es causada por trastornos del sistema autoinmune del paciente, incluyendo principalmente la tiroiditis de Hashimoto y la enfermedad de Graves, etc., y la formación de estas enfermedades tiroideas está estrechamente relacionada con la tiroglobulina (TG) y la peroxidasa tiroidea (TPO) [5].
Significado Clínico
Hormona estimulante de la tiroides (TSH) :
La determinación precisa de la TSH es la primera opción para juzgar si la función de la tiroides y del eje hipotálamo-hipófisis-tiroides es normal.