Tensiómetro de mano Switch 2.0

Tensiómetro de mano - Switch 2.0  - ERKA
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Características

Tipo
de mano

Descripción

El ERKA Switch 2.0 Smart convence por su eficacia y flexibilidad: además de un cómodo manejo y manejo, ofrece a cada usuario la talla de manguito correcta con los manguitos ERKA. Smart. Ya en la fase de producción, todos y cada uno de los aparatos ERKA se someten a nada menos que 49 controles de calidad y funcionamiento, incluida una última inspección final controlada al 100% por ordenador. Así garantizamos que el usuario tenga a su alcance el mejor tensiómetro para sus tareas profesionales. El uso de una membrana especial de cobre-berilio templado en combinación con el mecanismo de medición de filigrana garantiza la durabilidad junto con la alta precisión constante. Conforme a las normas reconocidas internacionalmente, como ANSI/AAMI SP 10, todos los tensiómetros ERKA son resistentes a los golpes, por lo que son ideales para el uso móvil en la práctica diaria. Esto garantiza una vida útil máxima incluso en el uso diario. Todos los ERKAMETER pueden utilizarse con los manguitos de presión arterial ERKA GREEN CUFF. Éstos llevan, gracias a su superficie única, el predicado BIOCOMPATIBLE y, por tanto, son especialmente respetuosos con la piel. La protección más segura es el uso de manguitos desechables reciclables. Aquí le ofrecemos una amplia gama. La omisión intencionada de PVC y DEHP en nuestros productos y la óptima cadena de suministro combinan ecología y eficiencia de la forma más impactante para actuar con responsabilidad. Todos los manguitos de tensión arterial reutilizables GREEN CUFF ERKA pueden desinfectarse a fondo y con rapidez gracias a su superficie y materialidad únicas. Su diseño ergonómico y extraplano, junto con su construcción ligera, hacen que la toma de la tensión resulte muy cómoda para el usuario en su rutina clínica diaria.

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Catálogos

* Los precios no incluyen impuestos, gastos de entrega ni derechos de exportación. Tampoco incluyen gastos de instalación o de puesta en marcha. Los precios se dan a título indicativo y pueden cambiar en función del país, del coste de las materias primas y de los tipos de cambio.