Se trata de un instrumento que utiliza corrientes de baja intensidad suministradas por electrodos que, al crear nuevas vías intracelulares, actúan directamente sobre la piel aumentando transitoriamente la permeabilidad de los tejidos. La bicapa lipídica de la célula sufre una reordenación temporal, dando lugar a la formación de canales acuosos en la membrana celular denominados generalmente electroporos. Estas vías de canalización conectan (pro-temporalmente) la superficie de la piel con la dermis subyacente, garantizando el paso de sustancias activas, incluidas las de alto peso molecular, que de otro modo quedarían retenidas por los mecanismos de retención de la epidermis. La membrana celular es así más permeable a una amplia variedad de moléculas hidrófilas, ya que el sistema Ultraderm interviene disminuyendo eficazmente la TEER (Resistencia Eléctrica Transepitelial) del estrato córneo, favoreciendo la absorción intracelular de la sustancia activa a través de canales acuosos. A diferencia de los antiguos sistemas de la competencia, este sistema es capaz de transportar principios activos sin la ayuda de bases conductoras. Este dispositivo permite reafirmar, tonificar e hidratar la piel, garantizando una rápida absorción y un efecto rejuvenecedor y luminoso en la piel desde las primeras aplicaciones.