El nebulizador de compresión utiliza aire comprimido para formar un flujo de aire de alta velocidad a través de pequeñas boquillas. La presión negativa generada hace que el líquido u otros fluidos se pulvericen juntos sobre la barrera y salpiquen el área circundante bajo un impacto a alta velocidad para que las gotas se conviertan en partículas similares a la niebla desde la eyección de salida. Los nebulizadores de compresión se utilizan principalmente para tratar enfermedades respiratorias como resfriados, fiebre, tos, asma, dolor de garganta, rinitis, faringitis crónica, amigdalitis, bronquitis, etc.
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