El Paragonix LUNGguard™, uno de los principales dispositivos de conservación para el transporte de pulmones autorizado por la FDA y con marcado CE, ofrece un entorno estéril y controlado que protege los pulmones del donante de daños físicos y térmicos.
Avanzando en la preservación pulmonar
El endotelio del pulmón es un tejido extremadamente vulnerable. Fuera del cuerpo, las células que antes estaban protegidas por condiciones homeostáticas protectoras se ven expuestas de repente a un entorno muy variable, que puede causar daños a una capa de tejido tan importante. Tradicionalmente, los pulmones de donantes destinados a trasplantes se colocaban en neveras comerciales llenas de hielo para transportarlos hasta el receptor. Este método presenta multitud de variables incontroladas que también pueden repercutir en la función del pulmón tras el trasplante. Las pruebas clínicas han demostrado que el uso de hielo puede exponer el pulmón del donante a temperaturas de congelación, lo que provoca daños celulares irreversibles.
El Paragonix LUNGguard es un dispositivo avanzado de preservación de órganos diseñado específicamente para estandarizar las variables de la preservación del pulmón del donante, proporcionando a los médicos una tecnología de refrigeración estable basada en la monitorización de datos en tiempo real.
Ventajas tecnológicas de la preservación avanzada de órganos
Almacenamiento en hielo tradicional
Utiliza refrigeradores comerciales no regulados por la FDA
Expone los pulmones del donante a un entorno no controlado de hielo a 0 °C
El tejido pulmonar se expone a un enfriamiento desigual, con el riesgo potencial de lesiones por congelación
Las reducciones impredecibles de temperatura en el refrigerador de hielo no se controlan durante el transporte
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