Los esguinces de tobillo suelen considerarse lesiones deportivas. Pero no hace falta ser un atleta ni siquiera un "guerrero de fin de semana" para torcerse el tobillo y lesionarlo. Algo tan sencillo como caminar o correr sobre una superficie irregular puede provocar un doloroso esguince. También es frecuente en caso de actividad o trabajo de jardinería, por ejemplo en el almacén.
Una lesión de tobillo se produce cuando la articulación del tobillo se tuerce demasiado fuera de su posición normal. En este caso, los tejidos blandos (ligamentos, tendones y cápsula articular) se estiran en exceso y pueden resultar dañados. La cicatrización de una herida consta de tres fases. La primera, la fase inflamatoria, comienza en el momento de la lesión y dura hasta cuatro días. La fase proliferativa se produce entre tres y cinco días después de la lesión e incluye células inflamatorias, fibroblastos y colágeno. La última, la fase de remodelación, puede continuar entre seis meses y un año después de la lesión. El resultado de esta fase es una cicatriz organizada, de calidad y funcional similar al tejido que se ocupa de reparar. La cicatrización de heridas es un proceso a largo plazo. Por ello, el uso de una férula ortopédica profesional es crucial para el soporte de la articulación.
Para ello, recomendamos encarecidamente nuestra tobillera con funda para el pie AM-OSS-11, que prevendrá la lesión y sujetará la articulación dañada del tobillo.
Descripción del producto
La tobillera AM-OSS-11 es una ortesis ortopédica profesional en caso de actividad física. La tobillera está equipada con una cubierta ligera hecha de ABS. La tobillera ofrece dos niveles de estabilización.
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