Cada año 1,0-1,5 personas por cada 100.000 son diagnosticadas de leucemia mieloide cronica.1 Se estima que la prevalencia de la LMC aumenta a una tasa anual del 4 % y que el número de individuos que viven con esta enfermedad se duplicará en 2030.2
El control de la LMC en la mayor parte de los pacientes diagnosticados se logra mediante la administración oral de un inhibidor de la tirosina cinasa (ITC) que específicamente se dirige a la actividad de la proteína de fusión BCR-ABL. En la actualidad, la evaluación de la eficacia del tratamiento para la LMC requiere un ensayo de diagnóstico molecular para medir el nivel de transcritos (ARN) de BCR-ABL. Los pacientes son sometidos a pruebas de BCR-ABL cada 3 meses, de acuerdo a las directrices internacionales establecidas.
Los resultados cuantitativos se normalizan primero frente a un gen de referencia como ABL.5 Posteriormente, los resultados se convierten a una escala internacional (EI) que armoniza los informes de la respuesta molecular.6 A pesar de los esfuerzos por optimizar el control de la enfermedad, solo un tercio de los pacientes con LMC recién diagnosticada están adecuadamente controlados durante el primer año de tratamiento.7 Por tanto, es necesaria una prueba molecular más accesible para mejorar los resultados de los pacientes con LMC.
La solución
Xpert BCR-ABL Ultra es una prueba cuantitativa para los transcritos de puntos de ruptura principales (p210) de BCR-ABL que proporciona resultados moleculares a demanda y de alta sensibilidad.